viernes, 5 de diciembre de 2014

dejarte ir

La sangre recorre mi piel como si alguien hubiera encendido mil llamas en mi carne,
un monstruo quiere salir pero su dolor solo se escucha en mis lágrimas,
que silenciosas recorren mis mejillas,
esas que me impiden ver.

Es momento de parar toda esta locura,
de decirnos las verdades como declaraciones de guerra,
y esperar un ultimo beso para decir adiós.

Me di cuenta que las playas de tu cuerpo ya no reciben mis barcos,
que mis caricias ya no son bien recibidas,,
que peso como carbón en tu lecho,
que mi aroma es otro olor en tu olfato.

Es difícil pero el adiós es el único elemento liberador,
la espada que separa nuestros sueños siaménicos que juntos construimos,
y que ahora son derruidos para dar paso a unos nuevos.

Es mejor ser islas separadas,
donde cada una crezca de forma independiente,
donde cada uno crece a su modo en libertad,
donde el amor se conforme con una amistad.

No te odio por que te amo,
no te odio aunque por dentro un sentimiento amargo quiera vomitarlo lejos,
¡no te odio ... te amo!,
y ese amor hoy me obliga a desearte buen viento,
a dejar que otros invadan tu cuerpo,
a dejar que otros sueños renueven tu camino.

Pero lo hago por una sonrisa tuya,
por ver que eres feliz,
y esa felicidad será libertaria para mi,
me dejara libre en el perdón a mi decisión

Recibiendo mi camino como un nuevo reto,
sabiendo que ahora debo conquistar mis sueños,
y reinventarme de un modo distinto,
sabiendo que en mi reflejo esta la respuesta,
quitarme el llanto de mi pecho,
y abrir las ventanas de mi ser,
para ser libre de nuevo,
para crear mi mundo perfecto.

Gracias amor nunca te olvidare,
tu huella sigue en mi,
pero ahora es mi voz la que me dicta mi camino,
y eso me hace feliz.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario