martes, 25 de octubre de 2016

al final del sendero



Cuando mi corazón late,
un caballo brioso y oscuro emerge,
dentro de mis sombras y luces.

Camino buscando una pequeña mariposa brillante,
que me ilumine el camino,
un camino difícil pero hermoso,
por donde mis pies descalzos caminan.

Se que no hay un mañana,
se que no hay un ayer,
todo es un eterno ahora,
un inalterable hoy.

Se que los besos se irán,
y las lágrimas se secarán en mis mejillas,
las carcajadas solo serán un eco que se pierde,
en los socavones de los años,
esos que ahora veo acumularse en mi espalda,
mientras rasguñan tiernamente mi cara.

Amada vida,
eres una pasajera,
que un día me vio nacer,
y que paciente y cariñosa espera, 
a entregarme tus regalos de espinas y rosas,
para que aprenda algo nuevo,
un nuevo sabor,
un nuevo amanecer.

Camino de mariposas con luces,
camino oscuro,
al final…

Si, al final del sendero.

Por Renzo Corredor

viernes, 21 de octubre de 2016

lo importante

Esperar a que otros te digan de que color es el sol,
es la ceguera de los homínidos,
solo basta con que escuches el viento y bebas del agua,
para que sepas que hay solo una vida,
después de eso no hay nada mas que te debe importar, 
lo intangible es para lo inexistente,
y lo existente esta comiendo tu reloj,
ese reloj en ultimas es tu verdadera vida,

y esa..si te debe quitar el sueño.

Por Renzo Corredor

sábado, 15 de octubre de 2016

La vida

La vida es eso: un momento,
un devenir que se acaba,
una mañana que siempre esperaremos,
algun dia esa mañana, esa tarde o esa noche,
nunca llegará para nosotros.

Por Renzo Corredor

viernes, 14 de octubre de 2016

La hora que espero



Y allí estaré,
tal vez sentado en un parque,
o caminando por una calle,
o en un cama.

Y allí estaré,
esperando esa noche,
ese amanecer,
o ese atardecer que nunca llegará a mis ojos.

Los cerraré justo cuando más lo deseaba,
me quedaré quieto en ese momento...
y me abandonaré.

Me perderé en la última hora,
minuteros seduciéndome para que duerma en sus brazos.
un inmenso reloj que da su último movimiento,
un tic tac que borra mi recuerdo.

Y aquí estoy de nuevo,
esperando que me llamen para el circo de las emociones,
para vivir de nuevo.

Por Renzo Corredor

La costa

Tome un bus, 
después un tren y cuando llegue a la costa,
pregunte a un barco pesquero si podía ir con ellos,
nunca había pescado, 
solo quise saber que se sentía.

Por Renzo Corredor

Ayer

Ayer me lleve un barco,
lo cargue sobre mi espalda,
me dolía… si
pero me dolía mas no verlo nadar.

Ayer me lleve un avión,
primero lo devore con mil bocas,
casi no trago sus alas,
pero me alegre cuando porfin después de regurgitarlo,
lo arroje sobre unas nubes cuando viaje a las montañas.

Ayer me lleve un tren,
metí cada vagón en mi corazón, 
casi no puedo con su vapor,
pero cuando vi ese desierto junto a mi casa.
me di cuenta que su sonido podría darle vida.

ayer me olvide de ti y con eso me libere de forma inmediata.

Por Renzo Corredor

jueves, 6 de octubre de 2016

Te fallamos Colombia



Te fallamos,
tus dolores y tu carne se pudren en el inmenso silencio,
junto a las minas que arrancan piernas, 
que ahora nadie quiere sacar,
esas que ahora crecen en los corazones de un pueblo indolente,
de una nación miserable que se alimenta de su odio,
para seguir mirando con rabia su oscuro futuro.

De nada sirvieron los llantos de madres y padres por sus hijos en bolsas,
de nada sirvieron querer con ansias un mañana mejor,
ahora solo nos queda un fusil en las manos,
una razón mas para decir que perdimos
y que seguirá siendo un estado inalterable.

Perdónenos hijos y nietos por nuestra estupidez
preferimos seguir muriendo ante el temor del cambio,
nos aferramos a seguir llenando de cadáveres nuestras conciencias
y alimentarnos de la mierda que escupen nuestros líderes
para arrancarnos los ojos y comerlos con caviar
en algún encuentro de grandes elites.

El campesino seguirá mutilado,
mientras huye de la violencia dejando su terruño,
para irse a vender dulces en un semáforo.

El guerrillero seguirá armado mientras se pudre en la selva,
y el paramilitar cortando con la motosierra cobrando vacunas,
ambos contratados por narcos sin conciencia.

Al militar una reluciente bandera,
en el ataúd que le espera.

el político seguirá engordando mientras bebe whisky y lee los diarios,
el ciudadano comerá palomitas mientras ve una novela de putas en la tele,
esperando que la huesuda muerte llegue en forma de bomba o de atentado,
y devore su familia.

Ahora el juez llamado tiempo,
sentencia nuestros días,
a la espera que la misericordia de Dios,

nos alcance.

Por Renzo Corredor