martes, 13 de octubre de 2015

En mis balcones

Y allí están mirando al infinito,
queriendo suicidarse desde mis balcones,
temerosas y ansiosas,
tomadas de las manos transparentes,
esperando a que el vacío se abra inmensa y las devore.

Allí se asoman como dos diminutas estrellas,
hasta que el temblor las hace caer,
reventando sus organos acuosos contra mis mejillas,
dejando que su sangre invisible se derrame y queme ante mi dolor.

Y allí están de nuevo,
resucitadas y de nuevo listas para morir,
deseando ser rios que abran un canal de desespero en mi rostro,
y se lleven este infierno en mi interior.

Por Renzo Corredor

martes, 6 de octubre de 2015

Sólo tú



No tengo que decir,
solo esperar que en el viento me hables,
que en el frio me abrigues,
y cuando el calor abrazador de tu amor,
llegue a lo mas profundo de mi ser,
sanes mis heridas y me de por enterado,
que tu presencia siempre estuvo aquí.

Era yo el que me alejaba,
huía de tu voz, de tu palabra liberadora y llena de verdad,
era yo quien me sentía indigno de tu amor,
era mi pecado el que como barrera me impedia beber de tu perdón,
era mi odio y mis rencores que hoy se quiebran,
que me alejaban de tu abrazo liberador,
me limpies las lagrimas de sal,
me liberes de mis cadenas.

Eres tú... sólo tú,
quien hoy me llama hijo y me llena de amor,
eres tú... sólo tú... mi Señor.

Por Renzo Corredor