jueves, 30 de julio de 2015

Acorazado 3456



Te abres camino como un gran tornado de sangre,
día tras día, año tras año,
devorando cuerpos como moscas,
mirando con mil ojos rojos,
deseoso por saborear mas huesos,
a la orilla de un lago oscuro y profundo.

Siempre usando banderas,
rojas y azules,
dejabas que se amamantaran de tu odio,
para que empuñaran las armas,
y atacaran a sus hermanos.

Todo en una orgia incesante de desangre,
en un infinito río rojo que corría por cordilleras, valles y playas,
algunos cuerpos aun hoy siguen durmiendo sin nombre,
aun muchas almas se mueven lentas y temerosas por caminos polvorientos.

Esa es tu ley,
una nación sumida en la miseria,
donde de cuchillos y machetes,
se pasaron los asesinos a las armas,
explosiones y minas que arrancan con su dientes,
y saliva maligna los miembros de campesinos y niños en nuestros campos.

Eso eres... una maldita sombra,
que se niega a partir,
que se arraiga en los corazones silenciosos de todos aquellos,
que miran con rabia y babas que salen llenas de rencor,
mientras miran la tele.

Maldita guerra que no nos deja dormir,
desde que la bandera tricolor se poso en tus montañas,
incluso desde mucho antes,
solo vives esperando como un jaguar agazapado en lo oscuro,
para devolverte y comernos uno a uno,
sin respetar edades ni géneros.

Maldita guerra que te niegas a partir,
hoy solo rezo en una oración indecible tu partida,
para que esta tierra de ensueño viva tranquila,
para que no haya mas lágrimas,
donde la paz con sus aves de ensueño,
perduren en nuestras calles, campos y ciudades.

Por Renzo Corredor

martes, 21 de julio de 2015

Secreto Culinario



¿Cómo decirte que me sentía?
estaba sola en la cocina ,
y apareces como una sombra,
para tomarme entre tus manos.

Apretando fuerte mi garganta,
hasta dejar un hilo de aire que entraba lento hacia mi pecho,
ese al que abrazabas con fuerza,
mientras extraías con tus dedos de sus puntas el calor,
ese elixir que te alimenta.

Me besabas la espalda,
mientras tus manos se abrían paso,
por mi ropa, dejándola caer,
tímidas y excitadas en el suelo.

Tu sombra y la mía se fusionaron,
afanosas por dejarse en una oscura unión,
mientras me alzabas rápidamente,
sin dejar de meter profunda: tu lengua en mi boca.

Ahora sin impedimentos,
arranco tu cinturón,
queriendo devorar tu serpiente,
es tanta mi hambre que no me importa el reloj,
ni las ollas que se queman en la cocina.

Me tomas en tus manos ,
decidido y fuerte,
como si un instrumento de carne y hueso,
fuera para tu deseo... para tu placer.

Mil formas en armónica ejecución,
me dejo poseer en variadas posiciones,
alimentando tu deleite,
dejando que mi sudor y mi piel se vuelvan una junto a la tuya.

Atados en carmesí desenfrenado,
tus dedos acarician mi selva prohibida,
abierta como una flor en una tarde de verano,
dejo que me acaricies mientras, dejas tu semilla dentro,
mientras riegas mi jardín con tu elixir y haces que grite,
atrapada por tu cuerpo frente al espejo.

Al final terminamos mojados,
yo sentada en tus piernas que ahora me tiemblan sin parar,
con una sonrisa de satisfacción te doy mi ultimo beso,
lleno de pasión y agradecimiento,
por dejarme tus manos como meteoros en mi piel,
marcados y difíciles de olvidar.

Hoy cocino de nuevo sola...
pero tu sombra no aparece por la puerta.

Por Renzo Corredor

viernes, 10 de julio de 2015

por la ventana



¿Y que pasa si no hago nada?
solo ver como la lluvia moja todo,
arranca los recuerdos de un sol luminoso,
cambiándolo por lágrimas negras.

¡Que hermoso!
es ver correr débiles almas vestidas de corbatas y vestidos
pensando que sus vidas son lo mas importante
cuando son solo carne que con el tiempo
se va pudriendo.

Que hermoso es ver metales hecho carros,
esos que rugen y devoran sangre de dinosaurio,
mientras cagan su infección al aire,
esa que nuestros pulmones devoran,
los árboles y los animales también,
mientras se pone caliente el ambiente,
mientras nos hervimos en el caldo de nuestra infección.

¡Que hermoso!
es saber que soy el recuerdo en el cerebro de alguien,
un leve momento que no pasara de un siglo,
y mi nombre se quedara disimulado en algún álbum de fotos,
donde un niño pequeño lo mire mientras pregunta,
y nadie sepa que decir.

¡Que hermoso... hermoso es!

Por Renzo Corredor.

jueves, 9 de julio de 2015

Silencio de Amor



Y allí estas besándome frenética e imparable,
desatándome el cinturón,
mientras bebes de mi miel,
mientras te dejas desvestir también.

Y allí estoy levantándote la falda,
dejando que tu calor escape,
para dejarme devorar por tus ansias,
por tu hambre de pasión,

Muerdo palmo a palmo tu cuerpo,
me alimento de tu sudor,
que corre delicado por tu pecho,
mientras tus manos se aferran a mi espalda,

Y me dejo llevar por el movimiento,
medio desnudos pero compenetrados,
nos miramos alegres,
un segundo o dos,
antes que vuelvas a cerrar los ojos,
y te pierdas en tus gemidos.

Y allí estamos en un espacio infinito,
donde mis sueños se hacen realidad,
donde creo tenerte de nuevo,
donde mi espalda se enrolla por tus piernas,
empujándome hacia tu volcán abierto,
dejando que mi ser se derrita dentro,
y permita que un grito acallado nos deje cansados,
pero con una sonrisa de satisfacción.

Estamos juntos dormidos y unidos ahora,
estamos juntos en un ser que se pierde entre pliegues,
en un respirar cadenciado y profuso,
en un silencio de amor.

Por Renzo Corredor
www.renzocorredor.com

Mano invisible



Reconozco que me he alejado de tu mano,
Con mi espalda genere un abismo,
Y ahora que las sombras me rodean,
Grito en pos de tu ayuda… ¡que miserable!

Pero no importa,
Eres como la luz que no se apaga,
Y por mas que el mundo diga que eres un amigo imaginario,
Sigo pensando que existes.

¡Que piensen y digan los demás lo que quieran!
Solo se que al dormir y cerrar mis ojos,
Siento que un ser que conforma todo,
Un ser que rodea todo: me da alivio.

No se como llamarte,
Y siendo sinceros tu nombre no me importa,
Solo se que allí estas,
Aveces no entiendo las formas en que actúas,
Pero en ultimas mi ser humano es solo eso,
Carne y huesos.

El tiempo, el espacio y todo cuanto existe te compone,
Entender mi lugar y saber que me amas,

Es suficiente.

Por Renzo Corredor
www.renzocorredor.com

viernes, 3 de julio de 2015

Ave oscura



¿A que vienes?,
¿a reírte de las desgracias acuosas que huyen de mis ojos?,
solo eres un avechucho sin cuerpo,
que se esconde tras las puertas,
y rie a carcajadas.

Oscura pequeña e hiriente,
derretida por el deseo maligno de decir: te lo advertí,
pero temerosa por que en ese silencio,
donde existes como reina,
no eres mas que esclava de mi mirar.

Esta noche te veré volar sobre los cadáveres de mis sueños,
extrayendo de sus entrañas esmeraldas perdidas,
devorando como quien tiene hambre,
una a una y dejando que se escapen por su intestino.

Ave de mal agüero,
malditas palabras que se agigantan en mi desolación
dolor pequeño y punzante,
ave oscura que me mira desde el espejo.

Por Renzo Corredor
www.renzocorredor.com