jueves, 28 de julio de 2016

Miguel...


Crespo al viento en tus cabellos el mundo se cuela,
pies que han recorrido entre nubes ciudades y caminos con mil nombres,
ojos que devoran el mundo de un bocado,
sangre que es mía, corriendo por tus venas.

¿Un hermano?… no…mi alma gemela, 
que crecía mientras añoraba tener alas y salir a recorrer con maletas llenas,
las cuadras en noches de navidad mientras la pólvora no paraba de sonar,
rostro hermoso y casi davinesco que como esfinge marca una sonrisa,
esa que se marco en mis ojos desde cuando te vie en telas mostrada por mi madre.

Joven avido e inteligente, 
que habla con propiedad mientras las palabras las degustar,
y las saca como dagas puntuales que develan todo.

Corazon galopante y brioso,
enamoradizo incansable y deseoso de amor,
amor hacia los otros que se abandona te invade,
compasión infinita y respeto por el otro,
son tus sagradas escrituras.

Miguel: un angel,
que me acompaño en juegos, 
que ríe conmigo y abrazados soplamos las velas de su cumpleaños o del mío,
compañero incansable,
soñador infinito,
que hoy hace que mi alma se inflame,
de orgullo, de amor infinito y de agradecimiento con la vida,

por darme un regalo tan hermoso… si...mi hermano.

Por Renzo Corredor

No hay comentarios.:

Publicar un comentario